Prevención de enfermedades respiratorias

Prevención de enfermedades respiratorias

En el campo de la neumología, prevenir las enfermedades respiratorias siempre es mejor que curar. Las dolencias respiratorias leves pueden convertirse en un alto riesgo para la salud sino se toman en cuenta consejos de prevención. Pero más allá de prevenir las complicaciones es importante la prevención de las enfermedades respiratorias comunes, Gripe, Amigdalitis, Bronquitis, Pulmonía, Neumonía o Asma, porque siguiendo estas recomendaciones puede permitirnos evitar sufrir un riesgo innecesario.

Para comprender cómo lograr este objetivo, hay que conocer algunos consejos que, aunque no curarán estas enfermedades, contemplan unos pocos aspectos que logran, eso sí, reducir el número de casos de afectados por las mismas y reducir entonces el riesgo de las complicaciones que se derivan de las mismas.

Consejos para cuidar nuestro sistema respiratorio

Protéjase de los cambios bruscos de temperatura, los amaneceres fríos y los días cálidos suelen ser norma hoy en día, los cambios drásticos pueden enfermar fácilmente. Es importante que si se encuentra en un recinto cerrado cuando salga al exterior, se cubra ligeramente, evitando ese cambio que provoca gripe y otras enfermedades respiratorias.

Evite las multitudes, si en el hogar ya es difícil mantenerse saludable en las temporadas que abundan las enfermedades respiratorias, más difícil es evitar contagiarse de las mismas en aquellos lugares en donde muchas personas reunidas son un foco de contaminación. Evitar las aglomeraciones es la manera más segura de no contagiarse.

Con mucha eficacia comprobaron los neumólogos ya durante mucho tiempo que el consumo de vitamina C presente en cítricos como los jugos de naranja, guayaba, agua de limón, mandarinas y otros, son vitales a la hora de prevenir las gripes, catarros, amigdalitis y otros.

Cuando se contrae una enfermedad respiratoria en el hogar es vital, que siga las reglas básicas de higiene como cubrirse la boca al toser o estornudar, usar sus propios utensilios y evitar usar toallas y limpiadores comunes para así reducir el alcance del contagio. Hay que ventilar bien las habitaciones para que se aireen.

Evite enfriamientos, cuando llega el invierno el mojarse es una posibilidad enorme de enfermarse, por ello es importante estar al abrigo y usar capa y sombrilla, así como botas de agua, porque la lluvia fría moja los pies y es un foco de enfermedad directo.Si se moja cámbiese la ropa lo antes posible. Hay que abrigarse para no exponerse por el frío de la noche, guardar resposo y siempre visitar al médico. No fumar e hidratarse es vital, para seguir el proceso de protección de las enfermedades respiratorias.