Fotodepilación definitiva

Fotodepilación definitiva

La fotodepilación definitiva es uno de los métodos más requeridos en los centros y clínicas de estética alrededor del mundo. Si bien no se puede asegurar que los resultados serán permanentes, tras varias sesiones el vello irá desapareciendo paulatinamente y en muchos casos los pacientes no vuelven a presentar crecimiento del vello. Es importante consultar a un médico especialista con experiencia en este campo, para que sea él quien haga las recomendaciones pertinentes para optimizar los resultados.

La fotodepilación es el procedimiento estético que consiste en depilar el vello destruyendo el folículo piloso donde crece, para esto se vale del uso de luz mixta pulsada  compuesta por diferentes tipos de fotones que viajan a múltiples longitudes de onda en un rango de 590NM hasta los 1200Nm. La luz pulsada intensa o IPL es una luz  de tipo multidireccional, controlada por el equipo que la provee, resultan altamente versátiles debido a la cantidad de luz que emplean que permite cubrir áreas más grandes y complejas.

El tratamiento inicial para lograr la fotodepilación definitiva puede constar de 4 a 8 sesiones en las que se verá una diferencia desde la primera sesión, estos resultados pueden permanecer por meses e incluso años, pero se recomienda hacer sesiones de repaso para mantener los resultados obtenidos en el primer tratamiento. El vello en varias áreas puede simplemente desaparecer en el primer tratamiento pero en zonas donde hay mayor cantidad de vello puede volver a crecer rápidamente, requiriendo entonces de más sesiones. El numero de sesiones serán determinadas por el dermatólogo quien tomará esta decisión basándose en variables como el color de pelo, color de piel, calibre de pelo, profundidad de pelo, localización anatómica, sexo y el momento hormonal.

Algunas de las ventajas dan mayor importancia a buscar la fotodepilación definitiva son:

 – Se puede usar en todas las áreas del cuerpo.
– La posibilidad de tratar zonas más grandes del cuerpo al mismo tiempo.
– El riesgo de cambios en la pigmentación es reducido.
– Se puede realizar en cualquier color de piel y de vello, en cuanto más oscuro mucho más efectivos será el tratamiento.
– Es indolora
– No es un procedimiento invasivo

    La fotodepilación no se recomienda en:

    – Personas muy jóvenes.
    – La eliminación del vello en zonas delicadas.
    – En áreas con pecas, manchas, quemaduras, tatuajes o cicatrices.
    – Mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
    – Si se padece de acné o herpes
    En pacientes con varices, lupus, diabetes o epilepsia.